Santuario de piedra «flotante» supuestamente representa un universo descubierto en México

Arqueólogos mexicanos han revelado los restos de un santuario, o «tetzacualco», que se encuentra en un estanque natural debajo de un volcán ubicado cerca de la ciudad de México, a una altura de unos 4,000 metros.  Excavan un sitio en las costas de la laguna Nahualac, al pie del volcán Iztaccihuatl en el estado de México.
Según los investigadores del Instituto Nacional de Antropología e Historia, INAH, las piedras encontradas cerca del volcán Iztaccihuati parecían flotar en la superficie del agua y supuestamente fueron diseñadas como un modelo en miniatura del universo. Además, los arqueólogos encontraron piezas decorativas asociadas con el dios de la lluvia Tlaloc cerca del santuario de piedra.
La existencia de un tetzacualco (santuario) en medio de un estanque natural y el efecto óptico que se produce cuando el agua se refleja, de lo que parece que emana la estructura, sugiere que el lugar es la representación de un tiempo y espacio primigenios, un modelo en miniatura del universo.
Para explicar la estructura y los montículos de piedra que flotan en la superficie del agua, probablemente había un control ritual del agua que fluía de los manantiales que regaban el estanque y crean un efecto visual de flotación.
Estos efectos visuales, además de las características de los elementos que componen el sitio y la relación que tienen entre sí, nos hacen suponer que Nahualac podría representar un microcosmos que evoca las aguas primitivas y el comienzo del mítico espacio-tiempo .
En el mito de la creación azteca, todo en la tierra fue creado por cuatro dioses, quienes también crearon un monstruo marino llamado Cipactli. A medida que continuaron creando cosas, Cipactli, que flota en las aguas primitivas, destruye todo su trabajo. Por lo tanto, los dioses tuvieron que matarla y crear el mundo de su cuerpo.
El grupo de Nahualac, que supuestamente muestra la división de Cipactli y la creación del cielo y la tierra, consta de dos áreas.
El primero se describe como un estanque estacional, dentro del cual el tetzacualco, un templo rectangular hecho de piedras apiladas sin cemento, fue construido en la época prehispánica.
La segunda área está situada sobre un valle donde se encuentran los manantiales. Los descubrimientos están siendo analizados actualmente.
Mito de la Creación del mundo de los Nahuas:
Los nahuas tenían varios mitos de la creación, resultado de la integración de distintas culturas. En uno de ellos, Tezcatlipoca y Quetzalcóatl se dan cuenta de que los dioses se sienten vacíos y necesitan compañía. Por ello necesitan crear la tierra con sólo un inmenso mar, donde vivía el monstruo de la tierra. Para atraerlo, Tezcatlipoca ofrece su pie como carnada y el monstruo sale y se lo come. Antes de que se pueda sumergir, los dos dioses lo toman, lo estiran para dar a la tierra su forma. Sus ojos se convierten en lagunas, sus lágrimas en ríos, sus orificios en cuevas. Después de eso, le dan el don de la vegetación para confortar su dolor. Y posteriormente se da a la tarea de crear a los primeros hombres.
Mito del monstro
Crearon el Inframundo haciendo señores de aquel lugar a Mictántecutli y a Michitecaeihuatl su mujer: luego los cielos. Reunidos en seguida los cuatro dioses formaron el agua; le dieron por señores a Tlalocatecutli y a su esposa Chalehiuhtlicue: estos dioses del agua tenían su aposento en cuatro cuartos, y en medio un gran patio donde están cuatro barreñones grandes de agua; una agua es muy buena y de ésta llueve cuando crian los panes y semillas; otra es mala cuando llueve, y con el agua se crian telarañas en los panes y se añublan; otra cuando llueve y no grana y se secan: y este dios del agua crió muchos ministros pequeños de cuerpo, los cuales están en los cuartos de la dicha casa, y tienen alcancías en que toman el agua de aquellos barreñones y unos palos en la otra mano, y cuando el dios del agua les manda que vayan a regar algunos términos, toman sus alcancías y palos, y riegan del agua para llover que les mandan, y cuando truena es cuando quiebran las alcancías con los palos, y cuando viene rayo es de lo que tenia dentro ó parte de la alcancía. Los cuatro dioses, por último, dentro del agua hicieron un gran pez llamado Cipactli, cuyo pez fué transformado en la tierra, con su dios Tlaltecuhtli, al cual pintan tendido sobre el Cipactli en memoria de su creación.
[Referencia: Historia antigua y de la conquista de México 1.pte. La civilisación; Escritura jeroglifica ; Numeración. Manuel Orozco y Berra]
Final de la Creación
Dos astros siguen siendo inertes en el cielo y es indispensable alimentarlos para que se muevan. Entonces otros dioses deciden sacrificarse y dar el «agua preciosa» que es necesaria para crear la sangre.
Por lo tanto, se obliga a los hombres a recrear eternamente el sacrificio divino original. Algo que constantemente tenían en mente, ya que ellos sabían que su vida importaba pero no de manera aislada, sino como parte de un todo. Todos significamos algo para alguien, muchas veces no nos damos cuenta. Pero somos parte de una sociedad que nos lleva a hacer de este mundo un mejor lugar.
Una de las muchas cosas que podemos aprender de las múltiples mitologías de nuestros antepasados, es que, para entender los fenómenos del universo debemos usar una metodología científica, sobretodo la Lógica, con silogismos correctos, aceptando que la Lógica es una rama de la ciencia de la Filosofía, que es una ciencia formal.
Carlos Cas

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