2 formas de locura
Vivimos en un mundo lleno de diversidad y variabilidad, donde cada individuo posee su propia singularidad y peculiaridades. Entre las personas existen aquellas que consideramos normales, que se ajustan a los parámetros y comportamientos socialmente aceptados. Sin embargo, también hay quienes, de manera maravillosa y fascinante, rompen con esas normas establecidas, siendo catalogados como locos, raros o excéntricos.
Sócrates hablaba de dos tipos de locura: «Pero hay dos formas de locura; una, debida a enfermedades humanas, y otra que tiene lugar por un cambio que hace la divinidad en los usos establecidos… En la divina, distinguíamos cuatro partes, correspondientes a cuatro divinidades, asignando a Apolo la inspiración profética, a Dioniso la mística, a las Musas la poética, y la cuarta, la locura erótica, que dijimos ser la más excelsa, a Afrodita y a Eros.»
Estas personas que se alejan de lo convencional despiertan nuestra curiosidad y nos invitan a cuestionar nuestras propias perspectivas y límites. Su forma de pensar, actuar y ver el mundo puede resultar desconcertante para algunos, pero al mismo tiempo inspiradora y liberadora para otros.
Cada uno de nosotros tiene un rasgo distintivo que nos diferencia del resto, ya sea en nuestras pasiones, intereses, habilidades o formas de expresión. Esta diversidad es lo que enriquece nuestro mundo y nos permite crecer como sociedad. Al abrir nuestras mentes y aceptar y valorar estas diferencias, abrimos la puerta a un mundo lleno de creatividad, innovación y posibilidades infinitas.
Por tanto, en lugar de juzgar y etiquetar a aquellos que se apartan de las normas establecidas, podríamos considerar celebrar su individualidad y única forma de ver el mundo. Quizás, en vez de catalogarlos como «locos» o «excéntricos», podríamos llamarlos «pioneros», «visionarios» o simplemente «diferentes».
Al final del día, todos somos seres humanos en busca de nuestra propia autenticidad y felicidad. Si bien ser considerado como «normal» puede parecer deseable para algunos, recuerda que la verdadera belleza reside en la diversidad y en la capacidad de abrazar y aceptar a aquellos que desafían las expectativas. Así que, celebremos a aquellos «locos» y «excéntricos» que nos desafían a pensar fuera de la caja y nos inspiran a abrazar nuestra propia individualidad.
Deja una respuesta