Adaptarse a la realidad

Las personas debemos de comprender que constantemente hay cambios en la vida. Claro que cuesta trabajo aceptarlos, pero son necesarios para nuestra propia vivencia, ya que como bien mencionaba Aristóteles, el bien, al que tendemos los seres humanos por naturaleza, es dinámico en las realidades.

Cuando se llega una fecha esperada, ya sea por cuestiones positivas o negativas, puede llegar a sentirse como si una carga pesada se hubiese dejado de lado, de la misma manera en la que los plazos que deben de ser cumplidos, se van poco a poco manifestando en la realidad de los seres humanos, deudas que pagar, cumpleaños que marcan la existencia de las personas, ceremonias que comienzan nuevas historias.

Es por ello que poco a poco podemos darnos cuenta de la manera en la que queremos avanzar, algunas personas tendemos a ser mucho más desesperadas que otras, pero al final eso genera una mayor angustia a la llegada de las diferentes fechas. Esto genera que poco a poco se vayan observando las diferencias en el modo de ser y de actuar, cuestión que se magnifica cuando la persona esta en constante aprendizaje, teniendo la mente bien abierta a lo que pueda suceder.

El mismo Albert Einstein, una de las mentes más maravillosas que ha existido y de los que más han permitido el avance de la tecnología y de las ciencias a través de sus teorías, “la mente funciona como los paracaídas, funciona solo si se abre”, por lo que debemos de estar dispuestos a reconocernos como una realidad absoluta que poco a poco va caminando en la vida.

Esto busca dar a entender la importancia de comprender que los cambios son una parte importante de la vida, que las personas debemos de pasar por diferentes etapas para poder llegar a donde queremos hacerlo, por ello mismo es normal sentir miedo, es normal sentir desconfianza, sin embargo, debemos de procurar enfrentar la vida con tranquilidad y con la mente abierta y dispuesta a lo que sigue en nuestras vidas.

Ana Eliza Mariscal