Entre el Tú y el Yo
Nuestra existencia cobra sentido con la pregunta: ¿quién soy Yo? La cual busca la respuesta sobre lo que nos hace único entre un mar de Tús, por lo que el Yo es lo que no es un Tú.
Es en esa autodeterminación que nos damos cuenta que no podemos ser alguien más que uno mismo. Mi existencia se ve comprendida en la diferencia de otro, de ser captado por un Yo distinto del Tú que se presenta.
Una vez que encontramos el Yo, debemos preguntarnos ¿quién eres Tú para mí? Y en esa diferencia la respuesta se vuelve una conexión de dos extraños aislados para volverse una relación en común: somos Yo en un Tú.
En muchas circunstancias de la vida que nos obliga a encontrar un sentido ante lo que parece absurdo, encontramos un alivio cuando salimos de nosotros mismos y buscamos a otros a ese Tú que nos da consuelo, energía para seguir adelante en nuestra existencia. Es importante reconocer que para uno mismo es importante el otro, no lo puedo imponer.
Las relaciones que hacemos en la vida dejan de ser otros individuos rompiéndo la brecha de la indiferencia par volverse un Tú, un otro reconocido por mí para dar sentido a mi existencia. Quienes permanecen es porque lo permitimos, quienes se vuelven extraños, es porque los dejamos ir.
Deja una respuesta